Y aún recuerdo aquella mañana, yo estaba sentada en el coche, al volante, mirando de reojo tu cara, sitiendo el peso de los segundos como si fuesen toneladas que aplastaban mi alegría. Te recuerdo sonriente, mirándome a la carita y jurándome que te acordarías de mí, que apenas serían unos días y estarías abrazandome otra vez. No puedo olvidar cuando abriste la puerta y te bajaste, cuando me sentí sola, vacía, cuando el coche se me hizo un universo inmenso en el que me perdía, miraba tras el cristal tus pasos, caminabas hacia la estación y yo hacia el otro lado de la calle, rezaba porque el semáforo estuviera en rojo y poder contemplarte unos segundos más a través del cristal que marcaba los metros que aún entonces no eran kilómetros y no, la suerte no estuvo conmigo y el verde me hizo girar en la esquina y... ya no te veía, sentí como el aire me faltaba, no podía respirar, un nudo ahogaba mi garganta, un nudo de hilos de nostalgía, de sueños rotos, de espera, unos hilos que me decían que 15 días serían eternos sabiendo que estabas a mil kilómetros de mí y lloré, lloré como una tonta, lloré como sólo una niña podría hacerlo y como si de magia se tratase el teléfono sonó y tu nombre parpadeaba en la pantalla, lo cogí intentando disimular mis lágrimas, pero nunca he sido buena actriz, te bastaron dos segundos para saber que me pasaba y me intentaste convencer que la distancia no te alejaría de mí, que seguiría siendo tu niña, que sólo eran unos días de trabajo fuera, que volverías, palabras que callaban mis lágrimas pero no la sensación de lejanía que sentía. Me quedé horas en el coche mirando por la ventana si algún rayo de sol derretía el invierno de tu partida, mirando un reflejo de mí en el que sólo reconocía la tristeza.
Han pasado los días y cada vez son más difíciles, me llamas todos los días y me cuentas lo bien que te lo estás pasando, lo que me quieres y lo que me echas de menos, me cuentas miles de cosas y te imagino con tu sonrisa de niño prendida intentando captar todos los momentos con tus ojos de
Te echo de menos, te echo tanto de menos que no me basta con escucharte a través de un teléfono, estos días he dejado de ser yo, me he convertido en un reflejo, otra Ana, la que se plasma en un espajo mientras la verdadera yo te espera, llora tu ausencia. Vuelve pronto mi vida, creo que sin tí hoy por hoy no puedo ser yo. Te quiero.
Ana
8 comentarios:
Despues te metes conmigo porque dices que soy un moñas, pero este texto... jajajaja
Alegrome porque todo vaya tan bien y aunque tarde unos días en venir, así el reencuentro será más intenso ^^
Un besote y cuidado con las Pokeballs Apestosas Ajenas
xD
Después de una felicidad absoluta siempre llega el día en que nos ahogamos en nuestras propias lágrimas. Es horrible añorar tanto a alguien, pero en tu caso servirá para saber que aún le puedes querer más de lo que ya le quieres.
Tienes la inmensa suerte de que sólo serán unos días; cuando vuelva se puede recuperar el tiempo perdido, y con más ganas.
Un abrazo!
Ains chiki al menos ya estas a jueves. Las esperas siempre son tan odiosas...
Ya queda menos para que vuelvas a sentirte tú y para que esteis juntos. Un beso
Nimrod yo nunca he dicho que yo no sea moña, de hecho lo soy y mucho, pero me gusta serlo :P Ya me queda poco y espero el reencuentro pero igualmente le echo de menos mucho ;)
Besos wapo
Sarai se que soy afortunada pero bueno supongo que nunca nos conformamos con lo que tenemos y queremos mas y yo... pues quiero no tener que esperar a que vuelva jajaja, pero bueno no queda otra asi que bueno, como dices al menos me doy cuenta de todo lo que le quiero.
besos wapa
Aicha pues la verdad es que si ya es jueves y pronto sera lunes asi que en menos de un suspiro lo tendre conmigo y volvere a ser yo misma, mientras a disfrutar de los amigos.
Besos wapa
¡Qué va a ser jueves! Es viernes ya... ;)
Es putadón y se pasa realmente mal, pero también es cierto que sirve de mucho. Sirve para que te des cuenta de la realidad... Si estuvieses como si nada y no hubieras derramado ni una lagrimilla, la cosa no andaría bien.
De todo hay que aprender en esta vida y, también, de todo hay que tratar de sacar el lado positivo (y aunque no lo tenga, se fabrica).
Un besazo muy gordo y que el finde dure medio suspiro para ti ;)
Mi relación es entre mi boy, 300 km y yo... es durisimo, pero palabra del niño jesus que querer es poder y queremos tanto que todo lo superamos, tu no vas a ser menos, ánimo!!
:)
Vamos a ver reina del drama, que eres una reina del drama, tanto amor tiene que explotar por un lado y ha sido por la nostalgia, pero ¿y lo bueno que son los reencuentros? Esa sensación de felicidad suprema al ver a la otra persona sólo se consigue tras esa sensación de echar de menos. Pero para eso se inventaron los andenes de las estaciones, para escenas de amor de películas de Sandra Bullock.
Te quiero!!
Maria pues la verdad es que he aprendido muchas cosas, me he dado cuenta de cuanto le extraño y por contra de cuanto le quiero, asi que bueno ya ha vuelto y no ha sido para tanto pero es cierto que en esos momentos se me hizo inmenso. Gracias por pasar por aqui wapa. Besos
Anita yo se que querer es poder y nosotros no vivimos tampoco al lado, no estamos a 300km pero si a 60 y es lo q el me decia si de todas maneras no nos vemos todos los dias pero la sensacion de que estuviera tan lejos... aunque tambien te digo que se ha acordado mucho de mi y bueno como tu dices querer es poder y nosotros hemos querido y podido. Besos wapisima
Edgar tu sabes que yo siempre sere dramatica cielo, eso no creo que a estas alturas lo cambie, pero es que le echaba tanto de menos... que casi no podia respirar. El reencuentro ha sido genial salvo porque compartir todo hasta los virus no mola y la verdad es que ha venido resfriado y me lo ha pegado!!! argggg ahora me quedan unos dias de cama. Yo tb te quiero, sabes que siempre seras mi hermano
Ana
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